Casi a escondidas y a última hora de la noche, los socios de Bertone presentaron un candidato para intentar que la actual gobernadora logre ingresar a la segunda vuelta electoral.
Se trata del radical Juan pipo Rodríguez, quien será el garante del acuerdo que mantiene Macri con Bertone.
Luego de que el ex gobernador José Estabillo no se presentara ya que según se cuenta en los pasillos de cambiemos o ser fueguinos como les gusta llamarse ahora que su imagen está en picada. El ex gobernador habría pedido una suma exagerada para intentar romper la elección, quienes formaron parte de esa negociación cuentan de una suma que rondaría los 17 millones de pesos y la casa rosada dio un NO rotundo.
Al parecer las apetencias de Pipo Rodríguez no fueron tan ambiciosas e intentaran lograr el objetivo propuesto y aconsejado por un operador político que puso una idea central sobre la estrategia de Bertone, el operativo es “Romper la Elección” de esa forma lo habrían denominado en la mesa chica que manejan las negociaciones electorales entre Bertone y Cambiemos bajo el enlace y supervisión de Pablo Blanco y Federico Frigerio quien da el visto bueno final del operativo
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El operativo busca intentar garantizar un reparto de votos que logre lo que hasta hoy según todas las encuestas es imposible; que Bertone llegue a la segunda vuelta electoral. La desesperación alcanzo su punto máximo en el día de cierre de listas cuando se llegó a barajar la idea de que el propio Pablo Blanco sea el candidato a gobernador por cambiemos y garantizar el acuerdo político que mantiene Bertone con el presidente Macri.
El acuerdo Político de Bertone con Macri se concretó el día de la firma del pacto fiscal, donde el presidente le pidió dejar de reclamar por la continuidad de la 19640 a cambio de 500 millones de pesos y además de la ayuda de Toto Caputo para la obtención de deuda de unos 200 millones en dólares mediante colocación de bonos comprometiendo como garantía de pago las regalías petroleras fueguinas.
Tal es así que desde aquel día todas las autoridades del gobierno de Bertone buscaron minimizar la situación crítica de la industria local que comenzó con suspensiones y pérdida de puestos de trabajo y luego con cierre de al menos 27 fábricas.
El manejo discrecional de fondos públicos en obras de gran envergadura compromete sensiblemente a varios miembros del gabinete de Bertone y es allí el motivo de desesperación que por estas horas viven aquellos que pusieron la firma en varios proyectos; ya que en ninguna de las encuestas encargadas por el propio jefe de gabinete logran los votos necesarios para ganar ni en primera, ni mucho menos en segunda vuelta.
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